En primer lugar, una aclaraciĂłn: Lyle Sendlein es un gran tipo.
El centro de los Cardenales graduado de una secundaria local â la escuela Scottsdale Chaparral poderoso centro futbolĂstico de la localidad. (Lyle, fue de hecho parte de los cimientos del programa en el que ahora se ha convertido. Antes de eso, una temporada con promedio de .500 era fabulosa y varias veces el equipo fue apaleado por su similar de la escuela secundaria Mesa Mountain View, no obstante unas generaciones antes de Sendlein, la secundaria Scottsdale Chaparral tuvo como mariscal de campo a Darrell Bevell, y fue lo suficientemente bueno en este deporte como para llegar eventualmente a su actual cargo de coordinador ofensivo con los Halcones Marinos.)
Como graduado de una escuela secundaria local, tenemos una familiaridad inmediata con Sendlein, sin embargo, es tambiĂ©n protagonista de una gran historia, hijo de un ex jugador de la NFL, Lyle no fue seleccionado en el draft en el 2007 (nunca ha estado contento con eso) no obstante trabajĂł intensamente para eventualmente convertirse en titular clave del equipo que disputĂł el SĂșper TazĂłn y una persona que no sĂłlo ha sido el centro titular del equipo durante varios años, sino que ademĂĄs se ha ganado el respeto de sus compañeros de equipo hasta el punto que ha sido nombrado uno de los capitanes por varias temporadas. Es un tipo seguro, que estĂĄ siempre dispuesto a responder las preguntas, victoria o derrota, reconociendo que la gente quiere respuestas en ambos casos. Podemos reconocer que es aguantador, despuĂ©s de jugar casi toda la temporada del 2008 con una lesiĂłn en el hombro. ÂżEs un centro Todo Estrella? Puede que no. Sin embargo, ha sido constante, y ha sido un importante componente de la ofensiva de los Cardenales.
La noticia de que estarĂĄ fuera el resto de la temporada perjudica a los Cardenales. SĂ, algunos podrĂĄn señalar que de cualquier manera la lĂnea ofensiva no ha jugado bien, y eso no se puede discutir. Pero al igual que con la pĂ©rdida de Levi Brown, el beneficio de Sendlein, es de esperar, se sentirĂĄ mucho mĂĄs con su ausencia. Al momento, no sabemos si "las llantas podrĂan salirse" ahora que Sendlein (No. 63, en la foto de abajo) estĂĄ fuera, pero si tendrĂĄ un impacto y es discutible que podrĂa ser el impacto mĂĄs grande de entre todas las lesiones que ha sufrido la lĂnea ofensiva esta temporada, incluyendo la del trĂceps de Brown y la del cuĂĄdriceps de Adam Snyder.
(PodrĂ ser un buen argumento, porque la ausencia de Brown ha sido resentĂa sin duda.)
Se trata de la pérdida de un jugador veterano que significa algo como presencia tanto en el campo como en los vestidores. En un equipo que necesita esa influencia estabilizadora durante una racha perdedora, eso no puede ser bueno.











