El coordinador ofensivo de los Cardenales Harold Goodwin conversa con las madres durante la Clínica de Seguridad en el Futbol el martes por la noche en las instalaciones del equipo en Tempe.
Cuarenta y dos madres con sus hijos en distintas etapas de sus jornadas por el futbol americano recibieron un curso intensivo sobre la seguridad de los jugadores de parte de los Cardenales el martes por la noche.
La presentación de tres horas en las instalaciones de entrenamiento del equipo aumentó la conciencia sobre una serie de diversos temas, incluyendo el protocolo después de una conmoción cerebral, la forma adecuada de abordarla, el peligro del exceso y la hidratación adecuada.
Los Cardenales presentaron 'La Clínica de Seguridad en el Futbol' en conjunción con USA Football y su programa 'Heads Up Football' (Futbol Cabeza Arriba), que está diseñado para promover el desarrollo del deporte, inspirar la participación y garantizar una experiencia más segura para los jugadores en las categorías infantiles y a nivel escuela secundaria.
"Estamos tratando de mostrar a los padres cómo la NFL y los Cardenales de Arizona, en particular, estamos tratando de hacer de este un deporte más seguro," dijo Mo Streety, coordinador de futbol juvenil de los Cardenales. "Estamos tratando de enseñarles mejor la terminología y hacerles ver los diferentes aspectos de lo que sus hijos están experimentando."
El coordinador ofensivo Harold Goodwin y el coordinador defensivo Todd Bowles fueron acompañados por varios jugadores y ex-jugadores de los Cardenales durante una sesión de preguntas y respuestas para iniciar el evento, seguidos por el Dr. Javier Cárdenas explicando los peligros de las conmociones cerebrales.
Cárdenas dijo que la mayoría de las conmociones cerebrales no terminan siendo graves, pero el problema surge específicamente cuando se agravan las lesiones cerebrales.
"Si usted tiene una segunda lesión antes de haberse recuperado de la primera, las consecuencias pueden ser devastadoras," dijo a la audiencia.
El preparador físico asistente Chad Cook habló después acerca de la importancia de la hidratación, y señaló que es especialmente importante en un lugar tan cálido como Arizona. Luego fue el turno para el entrenador asistente de línea ofensiva Larry Zierlein y el entrenador de esquineros Kevin Ross, quienes hablaron de las mejoras en la seguridad del jugador.
"Antes, cuando yo jugaba, no se nos permitía beber agua," dijo Zierlein. "No sé cómo todavía estamos vivos. Ha habido un gran número de avances."
El grupo de madres se dirigió después al interior del domo inflable donde entrena el equipo, se pusieron los cascos y hombreras y participaron en una variedad de ejercicios. El evento fue muy alegre, pero también ayudó a mostrar a las madres parte de lo que experimentan sus hijos al jugar futbol americano.
"Hemos dado grandes pasos," dijo Streety. "Ha sido un gigantesco salto hacia adelante en el aspecto técnico, y más aún en el aspecto académico, lo mismo que en lo relacionado al conocimiento, la finalidad y el alcance de como este deporte se desarrolla."
