¡Saludos a la gran familia! como el novio que se quedó plantado en la esquina de plaza, así nos quedamos más de cuatro –incluyendo al mariscal de campo suplente de los Cardenales de Arizona, Matt Leinart—luego de la derrota de los Cardenales 20-17 frente a los Titanes el pasado domingo. Fue maravilloso ver como los Cardenales venían de atrás para reagruparse en la segunda mitad del partido y tomar la delantera 17-13  en el cuarto periodo –eso fue como conocer a la susodicha y proponerle una primera cita—luego vimos como se desplomó el pilar mas solido –la defensa— y el  arquitectónico  trabajo que habían realizado los defensores del equipo de Arizona a lo largo de toda la tarde, fue al final la parte más vulnerable y el atajo que utilizó la ofensiva de los Titanes  para recorrer 99 yardas con 2:37 por jugarse –ahí es donde la pretendiente decidió no acudir a la cita—y  más de cuatro nos quedamos con un "palmo de narices." El partido fue de lo más emocionante, de los mejor que presentó el calendario de juegos en la fecha 12, sin embargo "lo emocionante" no fue suficiente para que los Cardenales pudieran salvar su record de invictos en el camino (5-1) ni tampoco  para adjudicarle al joven mariscal de campo Matt Leinart lo que podría haber sido una trascendental victoria  en su carrera y una oportunidad de revancha frente a Vince Young. Los Cardenales ahora mantiene una marca de 7-4 y su ventaja sobre los 49's es de solo 2 partidos ya que San Francisco le ganó 20-3 a Jaguares. La carrera por el liderato de la división ahora se pone más complicada,  en la semana 13 Arizona recibe en casa a los imparables Vikingos (11-1), mientras San Francisco (5-6) estará como visitante en Seattle (4-7).