El caza-mariscales de Clemson Vic Beasley participando en los ejercicios del combinado para Exploradores de talento el domingo en Indianápolis.

INDIANAPOLIS – Crudas cifras, cuando se trata de un caza-mariscales de élite, todavía hacen a Bruce Arians sacudir la cabeza.

Un hombre elite en capturas consigue de 16 a 20 capturas por temporada, calculó Arians. No es una deducción difícil de ver cuando se traduce en alrededor de una jugada por partido – de entre 60 jugadas – eso lo convierte en una estrella. En el otro lado del balón, si un tackle es superado sólo dos veces en esas 60 jugadas, tuvo un mal partido.

"Nunca había figurado esto," dijo Arians con una sonrisa.

Pero incluso el entrenador de los Cardenales sabe que tener a ese hombre surgiendo por los extremos es crucial. Los Cardenales no tienen a ese individuo por ahora, incluso a pesar de que el apoyador externo Alex Okafor lideró al

equipo en capturas con ocho. Los Cardenales sumaron 35 capturas como equipo, pero fue un esfuerzo comunitario resultado del bombardeo   que disparó por todos los ángulos el entonces coordinador defensivo Todd Bowles.

Dieciséis diferentes Cardenales registraron al menos una captura, incluyendo cinco defensores profundos. Funcionó, pero no es ideal.

"La parte difícil de arremeter en comunidad, es que pones mucha presión en los esquineros y el hecho de tener que hacer las cosas de forma esquemática ejerce presión sobre muchas de las posiciones sobre las que preferirías no hacerlo," dijo el gerente general de Cardenales Steve Keim. "Todos sabemos que si hay presión sobre el mariscal de campo rival tienes que ejercerla desde diferentes posiciones, de esa manera eventualmente se está exponiendo uno mismo a (conceder) grandes jugadas."

Los Cardenales no han tenido un caza-mariscales dinámico consistente. John Abraham tuvo un gran año en 2013 con 11½ capturas, pero se perdió casi la totalidad del 2014 con una conmoción cerebral. Antes de eso, fue Bertrand Berry, quien firmó como agente libre (y consiguió 14½ capturas en su primera temporada con Arizona en el 2004.) La búsqueda ha sido constante, pero una vez más, la búsqueda está en curso para toda la liga.

Para Keim, un caza-mariscales elite se clasifica en la parte de arriba, entre tackles izquierdos y mariscales de campo y es una jornada constante. Los caza-mariscales en realidad se están buscando siempre, mientras que un equipo puede relajarse un poco si encuentra a cualquiera de las otras dos posiciones. Un caza-mariscales es bueno, pero se pueden emplear de diversas formas. Los Texanos tienen a J.J. Watt sin embargo seleccionaron en el draft a Jadeveon Clowney; los Broncos tienen a Von Miller sin embargo firmaron a DeMarcus Ware en la agencia libre.

"Me crie con la idea de que: 'Si usted tiene 12 caza-mariscales, consiga al número 13,' dijo el gerente general de los Potros Ryan Grigson. "Uno nunca puede tener suficientes caza-mariscales y eso es exploración de talento 101."

Grigson dijo que si hay un caza-mariscales que "te acelera el corazón" lo tomes  independientemente de cual sea tu necesidad. Encontrar uno que despierte ese tipo de interés no siempre es fácil. Hay jugadores proyecto que usted podría encontrar, y tratar de entrenarlos, y eso es lo que los Cardenales han tratado de hacer recientemente.

Okafor es un buen ejemplo, selección de cuarta ronda quien no podía mantenerse saludable hasta la pasada temporada. Al entrenador Arians le gusta el progreso que ha conseguido. Pero Okafor no es un tipo de velocidad que

hará que las ofensivas cambien sus protecciones de pase.

Un jugador como él, dijo Arians, obliga a que un ala cerrada o corredor se mantenga constantemente dentro para brindar ayuda – lo que hace que las ofensivas cuenten con un blanco menos a quien lanzarle. Seleccionar a uno en la primera ronda del draft tiene mucho sentido, pero tendrá que haber uno disponible para elegir.

En la agencia libre, cuestan $10 millones o más por una temporada, dijo Keim, y eso es si llegan al mercado. Justin Houston de Kansas City, por ejemplo, tendrá la etiqueta de jugador franquicia. En el draft, un excelente prospecto se espera sea elegido mucho antes que los Cardenales puedan seleccionar en la posición 24.

"La oferta y la demanda son un reto," dijo Keim.

Los Cardenales han dejado en claro, sin embargo, que seguirán intentando encontrar a uno (o más), mientras vayan saliendo. En el futbol americano actual no hay otra opción.

"Prefieres tener un joven (dinámico). O dos, en el interior y en el exterior," dijo Arians. "Entonces puede haber participación de la comunidad. Pero nunca habrá tal cosa como no necesitar un caza-mariscales élite."