Saludos a la gran familia desde el cuartel general de los Cardenales de Arizona, como siempre es muy placentero tener la oportunidad de saludar a todos los aficionados al Futbol Americanos es por este medio. Hoy estuve en una parte de la práctica del equipo que se prepara para recibir en casa a los Potros de Indianápolis, por demás un rival que impone respeto. Los Cardenales trabajan arduamente, los pupilos del entrenador Ken Whisenhunt saben que en el nido todo es posible, el año pasado los pájaros rojos, se dieron a la tarea de vencer en casa uno tras otro a dos peligrosos rivales los Bills  (Oct. 5) y los Vaqueros (Oct. 12). No hay ninguna razón por la que este año los Cardenales --a pesar de haber perdido el primero en casa frente a San Francisco--  no pueden lograr importantes victorias en su propio nido. De hecho, estas serán fundamentales, si el equipo pretende controlar nuevamente la División Oeste. Indianápolis llega al desierto de Arizona con record de 2-0 después de batallar en casa frente a los Jaguares en el estadio Lucas Oil y contra los Delfines en Miami. En ambos casos los Potros lograron sacar la victoria "a duras penas". Arizona viene de ganar el primero de la campaña 2009 en el camino frente a los Jaguares en el estadio Municipal de Jacksonville. Para marcar nuevamente su territorio y establecer la ventaja de jugar en casa, los Cardenales deberán ganar  frente a su afición y no creo que exista oportunidad más idónea  que la que se presenta este próximo domingo.