Ahora que todo ha terminado, la derrota del domingo para los Cardenales pudo habernos recordado – sólo por la sensación que deja en uno – una derrota similar en el Estadio University of Phoenix hace unos años. Era el primer partido de la temporada, los Cardenales venían de participar en el Super Bowl, y eran mejor equipo que los 49's, que entraron al inmueble aquel día. Pero los Cardenales jugaron mal, perdieron 16-10, y se sintió como si una gigantesca oportunidad se había desperdiciado, especialmente dentro de la división.
Aunque, los Cardenales ganaron después 10 de sus siguientes 14 partidos (a pesar de que perdieron su siguiente partido en casa también, contra Peyton y los Potros) y ganaron la división.
Existen diferencias ahora, por supuesto. Los Halcones Marinos destacan como solidos campeones de la división, y no había nada de eso en el 2009 de lo que los Cardenales tuvieran que defenderse. Los Carneros se están convirtiendo en un rival demasiado complicado también, porque tienen una buena defensa. Muy buena.
Sin embargo, no es como si los Cardenales se han descarrilado, o fueron puestos al descubierto el domingo. Movieron el balón constantemente. Simplemente no anotaron touchdowns, algo que se espera, teniendo en cuenta las primeras tres semanas, no será un problema a largo plazo. No pueden regalar el balón, pero eso también es algo que se cree no será un problema persistente.
Ya veremos con lo que viene adelante. Se avecina una racha corta pero interesante para Cardenales. Un juego en Detroit, una semana de permanencia en Virginia del Oeste y luego un partido en Pittsburgh. Después viene el partido en casa el lunes por la noche contra Cuervos. Los Cardenales enfrentarán a Leones en una semana corta, porque Detroit jugó en Seattle el lunes por la noche. El domingo no se logró el resultado que Bruce Arians quería, y deberán prepararse para el próximo.
— Carson Palmer recibió una buena cantidad de golpes. Fue capturado cuatro veces, luego de haber sido capturado sólo una vez los tres primeros partidos. Pero en cuanto al castigo físico, Palmer solo se encogió de hombros.
"Es un juego NFC Oeste," dijo Palmer. "Esa es su naturaleza propia. Es un partido riguroso. Son un equipo muy riguroso, una defensiva rigurosa. Me siento bien, mas allá por supuesto de lo que ha sucedido."
— Palmer no fue el único que recibió algunos golpes. Aparte de un par de fuertes golpes durante el jugo, el receptor John Brown fue básicamente demolido en su última atrapada del partido, cerca de la línea lateral por el esquinero Tremaine Johnson. No fue lanzado el pañuelo amarillo, aunque la banda de Cardenales estaba molesta por que un hubo castigo.
"Es de alguna manera sorprendente, pero eso es parte del juego," dijo Brown después. "Los réferis no necesariamente marcan todo así que uno simplemente debe jugar, hacer lo que tienes que hacer."
— El entrenador de Carneros, Jeff Fisher, en relación a que si el juego agresivo de su equipo perturbó a los Cardenales: "Vamos a jugar rigurosamente. Creo que podemos jugar mejor, pero vamos a jugar con rigor. Hubo algo de contacto por ahí, no hay duda."
— Fue sorprendente que la pérdida de balón de Benny Cunningham haya sido declarada jugada muerta tan rápido como la marcaron. Viendo la repetición, es difícil creer que desde el momento en que Cunningham fue golpeado por primera vez hasta el momento que el balón se disparó suelto el silbato puedo haber sonado. Debido a que se decretó como que el avance hacia adelante había sido detenido, la jugada no era revisable.
— Dicho todo esto, no parece que los réferis fueron factor determinante en este partido. Lo fueron las pérdidas de balón y el juego en franja roja. No conseguir un touchdown después de primera y gol en la yarda 1 fue devastador. Para no haber estado arriba en el marcador en ningún momento del partido sería difícil remontar. No obstante, eso pudo ser posible durante esa última trayectoria que se desinfló, aunque parecía que conducirá a un gol de campo para ganar – considerando que si hubo algo que hicieron bien los Cardenales el domingo, fue ingresar en rango de gol de campo.
— Muchos piensan que Calais Campbell jugó su mejor partido del año, y atiborró la hoja de estadísticas (11 tackleadas, tres para pérdida, media captura).
— Esta vez, fueron los Carneros quienes padecieron una lesión crucial. El apoyador Alec Ogletree que fue el mejor del equipo con 10 tackleadas salió en el tercer periodo con una lesión en el tobillo que requiere cirugía. También fue fuego amistoso – un compañero de equipo le cayó en su pierna durante una jugada. Ogletree es pieza clave en esa sólida defensiva.
— Fue la segunda vez que Cardenales corren para 100 yardas en un juego bajo la dirección de Arians y pierden el partido. Los Cardenales están ahora 14-2 en esos partidos.
— Chris Johnson se vio bien corriendo el balón nuevamente. Tuvo 83 yardas en 16 acarreos, 5.2 yardas por intento. Para quienes se preguntan por qué Chris Johnson no estaba dentro en la parte final del partido, David Johnson era parte del paquete ofensivo nickel (que fue el que Cardenales utilizó en la recta final) así que él estaba en el campo. David Johnson es también el mejor receptor en general a estas alturas.
— Seis de los próximos ocho serán en el camino. Muchos aviones en el futuro cercano.