En unas semanas, Calais Campbell será agente libre. Y en muchos aspectos, es el más intrigante de todos los agentes libres de Cardenales. Es un jugador muy bueno viniendo de una temporada muy buena, y no sería sorpresa ver más publicaciones como ésta, diciendo que Broncos de Denver deberían ir tras el gran liniero defensivo para apuntalar algunas de las debilidades defensivas del equipo. Tiene sentido — Campbell es de Denver, es un equipo preparado para continuar ganando (asumiendo que puedan conseguir juego consistente del mariscal de campo), y DeMarcus Ware podría estar listo para decir adiós.
Aunque enterrado al fondo de la columna se encuentra el punto de que Campbell no obtendría un gran contrato de Broncos, el movimiento tendría que darse entonces por la oportunidad de a) regresar a casa y b) jugar para un equipo ganador. Es ahí donde podrían presentarse los "peros". Cardenales quieren a Campbell de regreso. No, no parece que le ofrecerán un contrato más grande. Pero si Cardenales y, digamos, Broncos presentan ofertas "menores" similares es de suponer que Campbell se quedaría aquí. Y el hogar para Campbell, es Arizona. Ya no es Denver. Así está la situación con esto.
Con el dinero que estará disponible en general en la agencia libre, Calais tendrá oportunidad de ir a otro lugar y generar un gran cambio. Eso no se duda. Tendrá opciones para ir a otros lugares, y probablemente varias opciones. La gran pregunta es, ¿hasta qué punto Cardenales estarán dispuestos a ir tras un jugador que cumplirá 31 años en Septiembre? Es algo que la organización — y Campbell — han estado considerando desde hace meses. Nos estamos acercando al final de la historia.
