Las noticias no son buenas, con David Johnson (probablemente) relegado durante varias semanas y varios partidos debido a una muñeca dislocada. Lo más complicado es que no se trata de reemplazar a un individuo que terminó en la parte superior de la tabla de respaldos de corredores por eventualidades. Este es sin duda el mejor corredor en la liga. Si él sale de la alineación, eso hace una diferencia.
Cardenales tienen que encontrar la forma de correr el balón para seguir adelante. Esa podría ser una combinación de Andre Ellington y Kerwynn Williams. Informes de que Cardenales estarían firmando a D.J. Foster de la escuadra de entrenamiento de Patriots tiene sentido; En teoría, Foster podría convertirse en especialista de regreso de patadas de despeje. Patriots lo probaron un poco en esa posición durante la pretemporada (Foster no regresó patadas de entrega o despejes en la Estatal de Arizona). Si Williams está jugando demasiado como corredor, es poco probable que permanezca con una gran participación como especialista de regresos. J.J. Nelson también es una opción, o Brittan Golden. Elijhaa Penny sería opción como corredor cuando se requieran pocas yardas (big back) aunque el domingo, después de que Johnson se lesionó, Williams fue utilizado para correr por el interior en un par de juagadas de pocas yardas.
La ofensiva podría parecerse mucho al modelo 2013/2014, antes de que Johnson fuera seleccionado en el draft y antes de la resurgente temporada de Chris Johnson en 2015. Cardenales no corrieron tan efectivamente como quisieron en aquellas temporadas, aunque lo hicieron funcionar y ganaron juegos. Ahora, se trata de hacer lo que sea que pueda funcionar, y se espera que Johnson pueda regresar más adelante en la temporada para para buscar ese pase a la postemporada algo que Cardenales todavía esperan poder lograr.