El safety James Sanders corre con el balón suelto que recuperó escoltado por sus compañeros Daryl Washington y Calais Campbell para su touchdown de 93 yardas en la victoria del domingo 27-6.

Kevin Kolb no iba a jugar con sus  emociones este domingo, incluso después de haber jugado bien y  golpear a su ex equipo.

"Se siente muy bien, en verdad", dijo el mariscal de campo Kevin Kolb  después de que los Cardenales de Arizona  aplastaron a las Águilas de Filadelfia, 27-6, en el Estadio University of Phoenix.  "Se siente bien la victoria, pero lo más importante es que estamos 3-0". Añadió Kevin  Kolb.

Ese fue el mensaje que emanaba  de los vestidores de los Cardenales en la noche del domingo. La defensa había desmantelado a la mejor ofensiva de la NFL con cinco capturas, no permitió touchdowns y recuperó tres balones sueltos, incluyendo un retorno demoledor para anotación  de 93 yardas. Siendo en este momento una de las mejores unidades de la liga. Por otro lado, un regreso notable del receptor Larry Fitzgerald, una explosión en el terreno de juego con el corredor Ryan Williams y con una actitud renovada de Kevin Kolb.

Por primera vez desde 1974, la franquicia tiene marca de 3-0, pero lo que eso significa, es que tienen las ganas y el carácter para seguir peleando en lo que será su próximo partido en casa ante los Delfines de Miami.

"Creo que esto es nuevo para todos nosotros en este equipo", dijo Larry Fitzgerald. "Nadie nació en el '74 eso lo tengo bien claro," añadió.

El apoyador de los pájaros rojos O'Brien Schofield, comentó: "Nadie  respeta a nuestro  equipo, y eso está bien.... Trabajamos para ganarse  el respeto". Queremos que nos vean como rivales importantes siempre.

El safety Kerry Rhodes, quién tuvo otra actuación excelente, hizo su gran jugada por primera vez cuando no le permitió  al  receptor rival  DeSean Jackson avanzar estando  en la línea de la yarda 1 después de  un pase de 15 yardas de Michael Vick con 16 segundos por jugarse. No solo mantuvieron a las Águilas de Filadelfia  alejados  de la zona de anotación, además los obligaron  a utilizar su último tiempo fuera.

Dos pases incompletos después, Michael Vick trataba de buscar a un receptor para poder lograr la anotación pero Kerry Rhodes llegó por el lado ciego, golpeando fuertemente a Vick lanzándolo con fuerza hacia el césped. El ovoide salió de las manos de Vick y de inmediato el safety James Sanders (que está jugando en este momento  porqué el jugador titular de esa posición, Adrian Wilson estaba fuera por una lesión en la ingle) tomó el balón y se escapó.

Un convoy de Cardenales lo condujo por la banda ya con el reloj en cero, y protegiendo de manera magistral a Sanders el linebacker Daryl Washington con un bloqueo final para lograr el regreso de 93 yardas, para prácticamente sellar la victoria.

"Yo ni siquiera sabía que era el final de la primera mitad", dijo Sanders. "Me di cuenta que íbamos  al descanso cuando íbamos caminando a los vestidores,  pero nada más,  y que bueno, porqué era algo que necesitaba para poder recuperar el aliento" añadió.

Larry Fitzgerald tenía una sonrisa enorme después de la gran jugada, y Kevin Kolb  se notaba maravillado. "Esas son jugadas que se presentan una vez cada  cinco años y nuestra defensa lo hace una vez cada cinco partidos". Añadió James Sanders.

El que realmente necesitaba recuperar el aliento era Michael Vick, quien se encontró bajo fuego durante todo el partido. Vick completó apenas 17 de 37 pases para 217 yardas, nunca completó un pase profundo y avanzó  28 yardas por tierra. También fue el hombre que perdió  dos de los balones sueltos.

"Jugaron un gran partido", dijo el mariscal de campo Michael Vick.

"Queríamos seguir subiendo el volumen en cada drive, en cada avance del partido", dijo el linebacker Daryl Washington, que obtuvo  dos de las capturas. "Tenemos en este momento  mucha confianza". Agregó.

La ofensiva de los cardenales tuvo un gran papel en el partido, anotando un gol de campo en su primera posesión asegurándose de que la defensiva tuviera una ventaja con la cual jugar y enfrentar el partido.

Kevin Kolb lució bastante  sólido contra su ex equipo. No lanzó una tonelada de pases pero  lanzó 24 pases y completó 17 para 222 yardas, también lanzó un par de pases de touchdown. Kolb todavía no ha lanzado una intercepción en esta temporada.

Fue muy importante  la inclusión de Fitzgerald desde el primer momento. Tuvo nueve recepciones, para 114 yardas. El único error de  Fitzgerald de la jornada fue un bloqueo ilegal cuando Andre Roberts se escapó en una corrida  convirtiendo una jugada de 79 yardas en el territorio de las Águilas. El juego aéreo no se necesitó tanto para la segunda mitad, sin embargo, los Cardenales supieron avanzar por tierra y jugar con el reloj. Tuvieron una buena actuación Beanie Wells y  Ryan Williams, este último terminó con 13 acarreos para 83 yardas, después de tener actuaciones medianas en sus pasados partidos, como en el juego contra Patriotas de Nueva Inglaterra en donde perdió el balón.

"Para mi ha sido una semana verdaderamente larga" afirmó el corredor Ryan Williams. "He tratado de mantener la calma y estar concentrado" afirmó.

Los Cardenales son ahora sólo uno de los tres equipos invictos que quedan en la NFL, junto con Atlanta y Houston y se espera que puedan sumar una victoria más el próximo domingo ante los Delfines de Miami. 

Con esta tercera victoria, el mariscal de campo de los Cardenales de Arizona mencionó: "vamos permanecer humildes con estas victorias."