La derrota en Los Ángeles dejó sensaciones similares a otros partidos esta temporada, los Cardinals han sido competitivos en cada uno de sus 6 juegos disputados, pero ha faltado un mejor manejo de partido y por supuesto capitalizar en momentos decisivos. Josh Dobbs había brillado por su efectividad para lanzar y la forma en la que cuidaba el ovoide, en semanas consecutivas el 9 ha tenido errores que han sacado de contienda a los Cards.
Tras los eventos en el SoFi Stadium, el staff de coucheo, junto a Kyler Murray han decidido que era el momento para que el 1 volviera a los entrenamientos, sabemos que Dobbs será el que este bajo centro en los siguientes partidos, pero que Murray ya haya regresado a la rutina del equipo es gran paso en su recuperación.
No es noticia que las lesiones han impactado duro al equipo y la secundaría ha sido la más afectada, la ausencia de Budda Baker se ha resentido, además Jalen Thompson también tuvo que unirse a la lista de lesionados tras el partido contra los Bengals, mismo caso para Antonio Hamilton quien no terminó el partido frente a los Rams, lo positivo es que se ha recobrado la esperanza tras el regreso de Budda Baker a los entrenamientos, su liderazgo y futuro regreso deberán motivar al resto de sus compañeros, especialmente de cara al duelo de alta rivalidad frente a Seahawks.
Este fin de semana el equipo viaja a Seattle para medirse a otro rival divisional, el objetivo es claro y es similar al de la semana pasada, el equipo necesita regresar a los fundamentos que le habían funcionado al principio de la temporada, nuestro front 7 ha hecho un gran trabajo presionando QB's en 2023, hasta el momento registran 18 sacks, por lo que replicar esa presión contra Geno Smith será crucial para que no encuentre a DK Metcalf y Tyler Lockett, sus armas más peligrosas por aire.
La defensa contra el juego terrestre deberá ser otro reto para el equipo, cuando nos hemos medido ante buenos corredores el equipo se ha visto vulnerado, hay pruebas positivas de que se puede hacer un buen trabajo deteniendo la carrera, la semana pasada limitaron a Kyren Williams a solo 3 yards en el primer tiempo, hace falta redondear esas actuaciones, encontrar la forma de frenar a Keneth Walker será una labor difícil, pero la recompensa será grande en cuanto a la confianza de la defensa.
En cuanto al juego aéreo, los Cardenales tienen las esperanzas puestas en 3 jugadores, Marquise Brown, Michael Wilson y Rondale Moore, también con nuestro cuerpo de receptores hemos visto consistencia y sin duda el duelo que tendrán contra jugadores de Seattle como, Tre Brown, Ahkello Witherspoon, Jamal Adams y Quandre Diggs, será de lo mejor que veremos en este nuevo capítulo en la rivalidad divisional entre Cardinals y Seahawks.
En el papel los Seahawks parten como favoritos, sin embargo, los Cardinals han sabido adoptar el rol de underdogs y han demostrado que pueden competir y hasta sorpender, los regresos de Murray y Baker le inyectaron otra energía al equipo, por lo que no dudaría que este domingo los Cardinals lo den todo e intenten conseguir la victoria en Seattle. Como dato adicional, desde que se inauguró el Lumen Field en 2002, los Cardinals tienen 9 victorias en dicho estadio más que cualquier equipo visitante.