Si lo que está sucediendo ahora con Cardenales es parte de las dificultades que se presentan con la oxidación propia del inicio de una temporada, parece ser una buena idea tener que enfrentar en el camino a una poderosa escuadra como es el caso de Rams en una etapa temprana de la temporada. De esta manera el equipo podría obtener un mapa más claro de las áreas en las que se debe trabajar con mayor ahínco.
Ahora bien, si el plan de juego del entrenador en jefe Steve Wilks y su equipo están listos para funcionar, de igual manera, un partido contra el campeón defensor del banderín de la NFC Oeste, es la plataforma perfecta para poner eso de manifiesto justo en la semana 2.
Sería estupendo ver a los Cardenales compitiendo contra Rams a nivel de las expectativas. Para eso será necesario que cuando Cardenales tengan posesión del balón, la ofensiva consiga mayor producción en todos los rubros que le corresponden, es decir, tiempo de posesión, primeras oportunidades, acumulación de yardas y puntos.
Está de más decir que la formula no es cargar en hombros de la defensiva toda la responsabilidad de un posible partido donde la competencia sea el tema a tratar. Aunque, obviamente la defensiva tendrá que hacer su parte, ser, por lo pronto una defensiva más parecida a la que vimos en pretemporada.
Tomando como referencia lo visto hasta hoy por parte de Cardenales y Rams y considerando la ventaja de jugar como local, Rams aparecen como amplios favoritos en todas partes para salir por la puerta del triunfo el domingo. Estar en la posición de "underdog" también debería ser interpretado por Cardenales como una irritante razón para buscar la manera de tal vez no necesariamente congelar a Rams, pero si de contenerlos y con eso general la competencia que los partidos entre rivales de división siempre exigen.
Un partido competido contra Rams el domingo podría resultar en un poderoso suero que ayude a desterrar la oxidación física y emocional que podría estar afectando a un equipo como el de Cardenales que inicia una nueva era con todos los altibajos que eso representa y que además al menos en su primer partido no se desempeñaron acorde con el talento que poseen en sus filas.