El profundo de Panteras Kurt Coleman consigue la intercepción frente al receptor de Cardenales John Brown y el esquinero de Panteras Robert McCain durante la victoria de Carolina 49-15 el domingo por la noche en la partido de campeonato de la NFC.

CHARLOTTE, N.C. – En muchos cifras, la temporada fue la mejor que los Cardenales jamás hayan tenido.

Sin embargo después que el partido por el campeonato de la NFC se convirtió en un caos el domingo por la noche en Carolina y Panteras apalearan a Cardenales, 49-15, para llegar al Súper Tazón 50 y terminar con la temporada de Cardenales, el entrenador Bruce Arians fue contundente.

 "Si no colocas un anillo en tu dedo, la temporada no es un éxito," dijo Arians

Hizo una pausa.

"Nunca vi venir esto."

Fue espeluznante, desde el primer periodo cuando Panteras – Ahora 17-1 – crearon una ventaja de 17-0, desde las deficiencias defensivas hasta el peor partido que el mariscal Carson Palmer ha tenido como Cardenal. S requería un gran partido de parte del mariscal, en lugar de esto Palmer lanzó cuatro intercepciones y perdió dos balones, seis de las

siete volteretas de Cardenales.

 "Seguí sumergiendo al equipo en un pozo," dijo Palmer.

Arians rápidamente defendió a su mariscal de campo – "Carson no perdió el maldito juego, no hay nada malo en su maldito dedo," Aclaró Arians durante su discurso al iniciar su conferencia de prensa después del partido – y ciertamente Palmer no fue el único culpable.

De hecho, "no jugamos ni cercas de bien," dijo Arians, "especialmente nuestros mejores jugadores."

El esquinero Patrick Peterson tuvo un balón suelto costoso en una devolución de patada. El ala defensiva Calais Campbell fue penalizado en dos ocasiones. El receptor Larry Fitzgerald dejó caer un par de balones que normalmente hubiera atrapado. El esquinero Justin Bethel batalló. Y la secundaria permitió en conjunto jugadas para ganancia de 39, 54 y 86 yardas.

"No se pierde así cuando juegas tu mejor partido," dijo Campbell, agregando que estaba de acuerdo con las declaraciones de Arians.

"Duele decirlo pero es verdad."

Panteras mostraron porque fueron el mejor equipo en la NFL en toda la temporada, aunque Cardenales tuvieron una trayectoria en el segundo periodo que pudo haber cambiado el rumbo del partido – sin embargo no dejaron de cometer errores.

El primero vino después que Cardenales finalmente anotaron un touchdown – acarreo de una yarda de David Johnson – para poner el marcador 17-7, y después forzaron a Carolina a despejar, una patada que fue corta.

Peterson arrancó, esperando atrapar el balón y poder regresarlo lejos frente a una unidad de cobertura de Carolina que dejaba un tremendo espacio abierto por el sector izquierdo pegado a la banda lateral. Sin embargo Peterson quitó la mirada del balón y este se le perdió al momento de recibirlo, zafándose de sus brazos y fue recuperado por el defensivo de Panteras Teddy Williams – un ex Cardenal. Cinco jugadas más tarde el mariscal de campo de Panteras Cam Newton  saltó sobre la zona de anotación para una anotación de una yarda.

Más tarde en el segundo periodo, Cardenales evitaron sufrir daños consecuencia del balón suelto de Palmer luego que Peterson consiguió interceptar a Cam Newton y regresó el balón   por 72 yardas hasta la 22 de Carolina. Una anotación hubiera puesto a los Cardenales a 10 puntos en el medio tiempo, Palmer intentó conectar con John Brown en la zona de

anotación aunque nunca vio al profundo de Panteras Kurt Coleman esperando ahí para la intercepción.

Fue una copia exacta de la intercepción que lanzó Palmer en la zona de anotación en la derrota ante Acereros a principios de la temporada.

"Tratamos que sucediera mucho muy pronto con esa jugada," dijo Arians.

Palmer reconoció que empezó forzar pases en un esfuerzo por poner a Cardenales de regreso en el partido.

"La ventaja se fue haciendo cada vez más grande y se salió de control," dijo Palmer, quien hizo eco a su entrenador diciendo que su dedo no fue el problema.

Arians dijo además que el hecho que la defensiva permitiera un gol de campo en la primera marcha de la segunda mitad – hecho que consumió mas de 7 minutos en el reloj – no ayudó en nada.

Esos tal vez sean solo detalles por la manera en la que Panteras jugaron. A pesar de su intercepción, Newton estuvo certero, dando un giro de 180 grados a su actuación del año pasado ante Cardenales en el partido de la ronda de Comodines, mostrando porque será nombrado jugador más valioso de la NFL, Newton tuvo 355 yardas por aire en solamente 19 pases completos, lanzando dos pases para touchdown y corriendo para otros dos, sumó 47 yardas en 10 acarreos.

Newton ahora es un problema para Broncos mientras Carolina se proyecta como favorito para el Súper Tazón. Cardenales ahora entran a la temporada baja sabiendo que el equipo sufrirá cambios como siempre mientras el gerente general Steve Keim trata de remendar el plantel.

"Llegar al juego de campeonato de la NFC no era la meta, la meta era llegar al Súper Tazón," dijo el esquinero Jerraud Powers. "Esto muestra las mejoras que el equipo ha conseguido desde el cambio de entrenador (en 2013). La forma de ganar, la atmosfera ya está establecida. Es cuestión de nosotros ahora ganar el Súper Tazón.

"Sigue siendo un fracaso porque no alcanzamos nuestra meta final."

Arians no pudo dejar de sentir lo mismo.

"Si ese confeti no cae sobre tu cabeza, entonces fue un mal año," dijo Arians. "Al volver atrás vemos que hubo muchas cosas positivas, pero no se trata de eso. Se trata de ganar un campeonato."