Calais Campbell tackle defensivo estelar de Cardenales uno de los agentes libres pendientes más prominente de en la NFL.

Cardenales hicieron un intento para avanzar al Súper Bowl en 2016, sacrificando algo de dinero del tope salarial en el trayecto para dar los toques finales al plantel.

La decisión estaba ciertamente justificada. Después de una temporada de 13-3 y una plaza en el partido por el Campeonato de la NFC, el personal parecía mejorar cuando el apoyador externo Chandler Jones, el guardia Evan Mathis y el profundo Tyvon Branch fueron incorporados.

Sin embargo, una temporada con expectativas tan altas nunca se desarrolló como estaba planeado. Las deficiencias de equipos especiales, las lesiones, los infortunios en el juego por pase y un tanto de mala suerte contribuyeron a una decepcionante marca de 7-8-1 y sin participación en la postemporada.

Fue un crítico intento fallido, y ahora, con el mariscal de campo Carson Palmer lo mismo que el receptor Larry Fitzgerald en calidad de año-con-año con el retiro, este grupo podría estar en una tentativa más por el título.

El gerente general de Cardenales, Steve Keim, estuvo en envidiable situación la pasada temporada baja, con casi todas las piezas claves ya bajo contrato y la capacidad de rectificar el plantel. Esta temporada baja será mucho más ardua. Cardenales tienen 19 agentes libres sin restricción listos para entrar en contacto con el mercado el 9 de Marzo, y debido a algunas reestructuraciones en los últimos años, existe una gran cantidad de contratos de alto costo en los libros y un espacio relativamente limitado en el tope salarial.

Se deberán tomar algunas decisiones complicadas en piezas claves como el caso del tackle defensivo Calais Campbell, el profundo Tony Jefferson, el ala cerrada Jermaine Gresham y el profundo D.J. Swearinger.

"No es posible tener a todo mundo de regreso," dijo Keim durante una reciente participación en la estación radial Arizona Sports. "Por la forma en la que se establece el tope salarial, uno tiene que tomar algunas decisiones complicadas. Debes tomar algunas decisiones difíciles basadas en lo que es salario, edad, historial de lesiones. Son muchas cosas las que entran en juego. Esa es la parte difícil del negocio, porque todos nos sentimos emocionalmente apegados a estos individuos."

De acuerdo con el sitio web OverTheCap.com, Cardenales tienen actualmente cuatro jugadores entre los cinco primeros montos contra el tope salarial en su respectiva posición para el 2017. Fitzgerald es el segundo entre los receptores con $15.85 millones; Palmer es tercero entre los mariscales con $24.13 millones; Mike Iupati es tercero entre los guardias con $9.7 millones y Patrick Peterson es el quinto entre los esquineros con $13.71 millones.

Eso no incluye a Chandler Jones, quien podría estar entre los primeros cinco apoyadores externos si juega la temporada 2017 con la etiqueta de franquicia. Los contratos no son exorbitantes, mientras los cinco han jugado a nivel Pro Bowl durante varias etapas con el equipo, aunque eso pone demasiada presión en su desempeño.

Zack Moore colaborador de OverTheCap.com señaló que Cardenales tienen el más elevado porcentaje de dinero del tope salarial vinculado a sus dos contratos principales (Palmer y Fitzgerald) y entres sus tres primeros (agregue a Peterson) que cualquier equipo que haya ganado un Súper Bowl.

Patriots, por ejemplo, tuvieron su dinero mejor distribuido este año, en gran medida porque el tope de Tom Brady fue tan irónicamente bajo como $13.76 millones.

Evitando muchos tratos costosos "es cómo (New England) construyó el equipo del 2016 y eso es algo que Cardenales no podrán conseguir, eso los hace muy dependientes de esos costosos jugadores para proporcionarles un nivel élite de rendimiento y luego la necesidad de llenar ese espacio entre medio con un gran número de jugadores de bajo costo," dijo Moore.

Cardenales tienen un buen número de protagonistas comprobados aún bajo su contrato de novato, incluyendo al corredor David Johnson, al apoyador externo Markus Golden, al tackle izquierdo D.J. Humphries, al receptor John Brown, al apoyador Deone Bucannon y al receptor J.J. Nelson.

Eso ayuda a suavizar el golpe si algunos de los agentes libres se marchan a causa de ofertas más lucrativas en otro lugar. Aunque todavía habrá un hueco por llenar si una pieza como Campbell firma con otro equipo, lo que Moore percibe como probable.

"No conseguirán reemplazar su producción con un solo jugador, aunque la esperanza cuando lo reclutaron en la primera ronda era tener listo a (Robert) Nkemdiche para reemplazar a Campbell en 2017, así que él y otros tendrán que fajarse para intentar reemplazar esa producción," dijo Moore. "La línea defensiva sería un buen lugar para que Cardenales busquen un agente libre de bajo costo."

Moore cree que Jefferson podría regresar, ya que un acuerdo a largo plazo representaría un una suma baja contra el tope salarial en 2017. Cardenales deberían tener suficiente dinero para firmar nuevamente a varios de sus agentes libres de menor nivel si eso es lo que quiere Keim.

Sin embargo, existe una enorme cantidad de espacio en el tope salarial flotando alrededor de la NFL, y Cardenales tienen varios nombres prominentes listos para ingresar al mercado. Keim está iniciando el recorrido por una significativa temporada baja, mientras determina cuales  jugadores perseguirá intensamente, a cuales dejará partir y donde encontrar valiosos jugadores a costo módico.