Steve Keim ha demostrado ser excelente incorporando jugadores con contratos de un año y conseguir que sean impactantes: Eric Winston, Matt Shaughnessy, Karlos Dansby, Antonio Cromartie, Larry Foote, Chris Johnson y Dwight Freeney. Sin embargo, no todos resultan bien, y Sean Weatherspoon — que parecía tan prometedor en su momento — no funcionó.

Weatherspoon firmó de nuevo con Halcones de Atlanta después de su único año en el Oeste. Weatherspoon sólo tuvo 12 tackleadas en un papel defensivo extremadamente limitado (participó en sólo 125 saques de balón en toda la temporada) en 14 partidos. Necesitaba demostrar que podía mantenerse saludable y no lo consiguió, a pesar de que fue una señal de alerta durante su estadía en Arizona, no obstante cuando fue activado no jugó contra Carneros en Octubre y luego la siguiente semana, se mantuvo en la banca contra Leones.

Es difícil creer que Weatherspoon jugó con la primera unidad durante todo el proceso de preparación en la temporada baja, aunque en ese momento, Deone Bucannon estaba trabajando mucho como profundo también. Sin embargo, cuando llegó el campamento de entrenamiento, el bíceps femoral de Weatherspoon se convirtió en un problema, y mientras se perdió la mayor parte de los trabajos durante el mes, ya se había cavado un agujero para sí mismo del que nunca pudo escapar — sobre todo después que Kevin Minter mostró más de lo esperado mientras estaba en el campo de juego.

A favor de Weatherspoon, nunca puso mala cara (aunque parecía resignado desde el principio frente al hecho de no haber sido colocado en la parte superior de la tabla de posiciones). Estaba claro que no estaría por estos rumbos en 2016. Y ese es la parte positiva sobre los acuerdos de un año. Sí, algunas veces un tipo como un Dansby explota y se marcha con otro equipo. Después se tiene uno que "no funciona" como Weatherspoon y no se genera ningún tipo de complicaciones porque su contrato terminó y ambos lados pueden simplemente seguir adelante.