El tackle nariz Dan Williams sonríe después del entrenamiento el miércoles.
FLAGSTAFF – Dan Williams sólo quería evitar la advertencia de suspensión.
En el pasado, el tackle nariz dijo que había escuchado, "Dan, buen entrenamiento hoy – pero debes bajar de peso." Su objetivo era conseguir que el mensaje simplemente fuera, "Dan, buen entrenamiento el de hoy." Con todo y la fractura de brazo que sufrió la temporada pasada y que lo mantuvo fuera las últimas cinco semanas de la temporada, Williams se hizo cargo no sólo de su rehabilitación sino también del control de su peso.
"Quería mostrar a los entrenadores que había estado trabajando, que había madurado durante las dos primeras temporadas y que me he convertido realmente en un profesional," dijo Williams.
Eso se inició reportándose con un peso de 314 libras al inicio del campamento, una cifra significativa en el desarrollo de Williams. Dijo que quiere jugar en el rango de 315 a 320 libras durante la temporada, y por primera vez, pasó la prueba de carrera del equipo.
El año pasado, Williams llegó al campamento fuera de forma. Nunca tuvo los mismos problemas de sobrepeso que su ex compañero de equipo Deuce Lutui, pero nunca lograba conseguir su marca de forma sistemática. Ahora tiene planes de hacer precisamente eso.
"No hay duda de que Dan se ve muy bien," dijo el entrenador en jefe Ken Whisenhunt. "Estábamos bromeando hoy que cuando hagamos ejercicio de acondicionamiento después del entrenamiento este año él no tendrá que hacer trabajo extra por primera vez. Nuestros respetos para Dan. Dimos a conocer durante la primavera que confiábamos en Dan, y lo tomó muy en serio."
Williams, la selección No. 1 de los Cardenales en el draft 2010, es una figura clave en la defensa del equipo. David Carter agradablemente sorprendido con su juego sólido como novato el año pasado, pero los Cardenales todavía desean que Williams sea quien esté al frente. Su brazo está aliviado después de la grotesca forma en que se lo rompió el año pasado contra los 49's.
"Decidí, 'Hey, es hora de volver a trabajar y dejar de poner excusas," dijo Williams. "A pesar de que uno se siente de cierta forma, hay que hacer las cosas de la manera que los entrenadores quieren que lo hagas. Así se hace más fácil para todos."
TRABAJANDO EN LOS REPASOS
En el marco del nuevo convenio colectivo, si un equipo tiene dos entrenamientos en un día durante el campamento de entrenamiento, uno de ellos debe ser un repaso simple de las jugadas – que es exactamente como suena, sin cascos o ningún tipo de protección.
En el pasado, el segundo entrenamiento "más ligero" incluía por lo menos algunas cosas como un trabajo de siete contra siete, lo cual no puede suceder ahora.
"Básicamente eso ha quedado eliminado, pero todavía hay valor en esto," dijo Whisenhunt. "Podemos trabajar en la protección contra las acometidas o en la forma de acometer, ver cómo funcionan, cómo podemos mejorar. Podemos hacer trabajos con equipos especiales."
Los Cardenales tuvieron su primer repaso el jueves por la mañana.
HASTA 90
La temporada pasada, se le permitió a los equipos de la NFL incrementar la alineación de pretemporada de 80 a 90 jugadores debido al paro laboral y debido al poco tiempo de preparación para la temporada. Los propietarios decidieron hacer permanente ese reglamento.
Los 10 jugadores agregados probablemente no tendrán una gran oportunidad para quedarse en la alineación, pero eso da a los equipos una mayor comprensión de potenciales jugadores para el futuro, dijo Whisenhunt.
"Este negocio se trata de ser capaz de conseguir la mayor cantidad de evaluación e información de los jugadores como sea posible," dijo Whisenhunt. "Teniendo 90, sabes que sólo te quedarás con 53, y ocho en la escuadra de práctica, pero uno sabe que hay un número significativo entre el resto sobre los cuales usted tendrá información. En caso de necesitarlos en la semana 10, uno sabe más lo que puede encontrar."