Los Cardenales de Arizona fueron presa del drama en altas dosis el domingo por la tarde en el estadio University Of Phoenix frente a unos Tejanos de Houston  que a pesar de estar debajo en el marcador por tres touchdowns en el descanso de medio tiempo, jamás dieron señales de claudicar, tanta fue su disposición que al regresar de los vestidores después del medio tiempo, los Tejanos retomaron el control del partido y se pusieron parejos en el marcador 21-21. Más tarde en el partido después que la ofensiva de Arizona bajo la batuta de Kurt Warner no capitalizó la oportunidad de anotar para retomar la delantera, los Tejanos con su mariscal de campo Matt Shaub tuvieron el balón en sus manos una vez más con la amenazante posibilidad de tomar ventaja en el marcador. Fue entonces cuando el esquinero de los Cardenales Dominique Rodgers Cromarie se interpuso entre un pase del mariscal Shaub y su receptor para después de interceptarlo regresarlo por 49 yardas hasta la zona de anotación, esta fue la jugada que pudo haberle dado la vuelta al partido que al momento favorecía a los de Arizona 28-21, sin embargo, los Tejanos de Houston se mantenían sin dar marcha atrás. Restaban 2:20 por jugarse y en la patada de entrega después de la anotación de Rodgers-Cromartie, el encargado de regresar las patadas de entrega por parte de los Tejanos Andre Davis tubo un regreso de 63 yardas avanzando hasta la yarda 40 de Arizona, para poner de nuevo en excelente posición sobre el emparrillado a la ofensiva de Houston, que sin dar oportunidad a la especulación y con una ofensiva solida conducida por Shaub, avanzó hasta la yarda uno en terreno de los Cardenales para ponerse en la puerta de la zona de anotación amenazando con empatar el partido y mandarlo a tiempo extra. Fue entonces cuando la defensiva de los Cardenales decidió vestirse de gloria. La distancia era una yarda, las oportunidades para avanzar esa yarda y anotar fueron tres, las mismas que la defensiva de los Cardenales de Arizona se encargó de anular. Una vez más la defensiva de Arizona se da el lujo de detener a un contrario en tres oportunidades a una yarda de la zona de anotación, la primera vez un lunes por la noche frente a los 49's de San Francisco para evitar la derrota, y el domingo por la tarde frente a Houston para evitar el empate. Los Cardenales ahora se pasean con marca de 2-2 están los .500 de promedio. La actitud que mostró la defensiva de Arizona puede ser la chispa que  los Cardenales necesitan para encender motores y conseguir consistencia en el resto de la temporada 2009. El próximo compromiso de los Pájaros Rojos es en el camino, el próximo domingo en Seattle frente a los Halcones Marinos.