Los Cardenales terminaron eligiendo al receptor de Notre Dame Michael Floyd con la selección global No. 13 el jueves. Hubo mucha especulación/reportes de que los Cardenales estaban tratando de realizar un intercambio para moverse hacia abajo, pero al final, se mantuvieron en su lugar y eligieron a un receptor grande (6 pies-2 pulgadas, 220 libras) que se pensó sería el segundo mejor receptor en el draft después de Justin Blackmon.
Se había hablado de que los Cardenales debían actualizar la posición detrás de Larry Fitzgerald desde el año pasado. Ahora lo hicieron. No es un virtuoso de la velocidad. Probablemente traerá a la mesa una dinámica similar a la que Anquan Boldin ofreció cuando hizo pareja con Fitzgerald. Floyd consiguió 100 recepciones para 1,147 yardas y nueve touchdowns en su último año universitario, y 79 para 1,025 y 12 touchdowns en su penúltimo año.
Todavía en busca de un tackle en este draft – y sin realizar un intercambio para moverse hacia abajo, los Cardenales no seleccionarán nuevamente hasta la posición 80 global, en la tercera ronda – sin embargo los Cardenales calificaron a Floyd más alto (mucho más alto que al tackle Riley Reiff, obviamente). Necesitarán también un mejor juego de su mariscal de campo. Incluso los grandes receptores necesitan buenos pases lanzado en su dirección.