El mariscal de campo Carson palmer azota el balón luego de correr 8 yardas para conseguir los puntos de la victoria en el triunfo 19-13 el domingo sobre 49's.

SANTA CLARA, Calif. – Del vestidor de los Cardenales no salieron disculpas el domingo por la tarde, y tampoco estaba nadie enojado.

Fue, como el entrenador Bruce Arians dijo, "nada que ver con trampas y toda esa (improperio)." Su punto de vista sobre la que admitió grotesca victoria 19-13 sobre los 49's en el estadio Levi's fue simplemente eso – una victoria, de visita y divisional, y eso es lo que a final de cuentas importa.

"Fue un trineo duro de empujar," dijo Arians. "No fue nada sexy en lo absoluto."

Si los Cardenales (9-2) regresan aquí en Febrero para jugar el Súper Bowl 50, tendrán que jugar mejor de lo que lo hicieron frente a los 49's (3-8). Mucho mejor. Esperan que ninguna de las lesiones con las que salieron de este encuentro sea seria, después de que el esquinero titular Jerraud Powers (que parecía haberse lastimado la pantorrilla, pero probablemente pudo ser el talón de Aquiles) y los

Corredores Chris Johnson (rodilla izquierda) y Andre Ellington (pie derecho) tuvieron que abandonar el encuentro.

Pero después de que el mariscal de campo Carson Palmer capitalizó una marcha de 14 jugadas con una anotación en acarreo de 8 yardas para conseguir los puntos que representaron la victoria abriendo paso a la defensiva que logro contener a los 49's en su posesión final, la racha ganadora de los Cardenales  – ahora es de cinco partidos  – se mantiene, junto con su ventaja de tres juegos en la NFC Oeste. Esta fue la primera victoria de los Cardenales en San Francisco desde el 2008, rompiendo así una racha perdedora de seis partidos.

"Es un juego divisional de visita," dijo el ala defensiva Calais Campbell. "Nadie esperaba que fuera fácil."

Fácil, quizá no. Facilísimo, después de que los Cardenales lograron poner 39 y 34 puntos ante las dos mejores defensivas contra la anotación en la liga en las dos semanas previas y después de apalear a los 49's, 47-7, al principio de la temporada.

Los Cardenales ganaron la batalla de las volteretas por primera vez en más de un mes, pero la falta de juego terrestre – cerca de 70 yardas – y la incapacidad de poner el balón en la zona de anotación tenían el encuentro empatado a 13 en el último periodo.

El extraño partido estuvo acompañado de 26 primer y diez para los Cardenales con una enorme ventaja de posesión del balón (37 minutos contra 22) pero los Cardenales tuvieron menos yardas totales que los 49's.

"Están teniendo una difícil temporada pero salieron a pelear," dijo Palmer. "Eso es lo que vamos a recibir en el camino en el que estamos. Vamos a recibir lo mejor de todos porque la gente nos quiere ver caer."

La trayectoria ganadora fue ayudada con una de las 13 faltas contra 49's, una crucial penalidad por rudeza contra el mariscal después que Quinton Dial lograra capturar a Palmer.

"Me golpeó justo en la cara con la corona del casco," dijo Palmer.

Los 49's capturaron a Palmer más tarde en la misma marcha para poner a los Cardenales en situación de segunda y 14 en la yarda 35 de San Francisco, cuando Palmer logró soltar el que posiblemente fue su mejor pase del día – dando un salto hacia atrás para encontrar desmarcado a J.J. Nelson en el centro del campo para una ganancia de 34 yardas.

Nelson comentó que la jugada fue similar a una de la semana pasada ante los Bengalíes en la cual Palmer le lanzó el balón para lograr el touchdown en una jugada de 64 yardas.

"Sabía que si lograba ponerme detrás del segundo nivel, Carson iba a lograr pasarme el balón," dijo Nelson

El domingo, no iba a ser un día de campo, sin embargo. No iba a ver una anotación por tierra de una yarda; luego de un acarreo para perdida de dos yardas y posteriormente una penalidad, Palmer se las ingenió para escaparse por su lado izquierdo y anotar con solamente 2:38 por jugarse. La emoción generada hizo que Palmer azotara el balón, dando como resultado que Palmer tropezara aparatosamente.

"Pensé que se había tirado de espalda a propósito," dijo el esquinero Patrick Peterson dijo con una sonrisa.

Continuando con la juagada del touchdown de Palmer, el pateador Chandler Catanzaro falló el punto extra, obligando a los Cardenales a frenar la ofensiva de 49's con un Blaine Gabbert que de hecho tenía más yardas aéreas que Palmer (318 contra 271).

"Como defensiva, si queremos colocarnos donde deseamos estar al final del año, no podemos seguir con estos paseos de sube y baja tipo montaña rusa," dijo Peterson

Los 49's alcanzaron la yarda 30 de Arizona, pero en tercera y 10, Los Cardenales mandaron una carga completa, y el profundo Tony Jefferson – como lo hizo ante el mariscal de campo Colin Kaepernick en una jugada clave el año pasado en Arizona – otra vez logro el cometido.

"Deja vu de la temporada pasada," dijo Jefferson.

La jugada le costó a los 49's 10 yardas, y puso a Gabbert en cuarta y 20 logrando un pase de 18 yardas para Anquan Boldin, para de esa manera terminar el encuentro.

Los Cardenales pasaran por un escenario muy similar la próxima semana, cuando los Cardenales jueguen contra un (4-7) equipo de la NFC Oeste (Los Carneros) de visita (en San Luis). Ese, al menos, tiene un sabor de venganza después de los Carneros vencieran a los Cardenales a principios de esta temporada.

Arians mostró una pequeña sonrisa después del juego, proclamando la habilidad de su equipo de aprender mucho el domingo.

"Somos suficientemente buenos como para ganar sin haber dado nuestro mejor partido," dijo Arians.